Poco después de descontinuar la Note 7 en octubre, Samsung lanzó una investigación para identificar la causa raíz detrás de los incendios. Samsung pensó inicialmente que la batería era la culpable, razón por la cual hizo un llamado para recoger el primer lote de unidades de la Note 7 y reinició las ventas con baterías de otro proveedor. Cuando estos teléfonos también comenzaron a explotar, la empresa tuvo que descontinuar el dispositivo por completo.
Según el diario surcoreano JoongAng Ilbo, Samsung ha concluido su investigación, y revelará los resultados de la investigación a mediados de enero. Se dice que una combinación de factores ha contribuido al fracaso del teléfono, y Samsung buscará compartir los hallazgos como una forma de recuperar la confianza del consumidor que tanto necesita y asegurar que no vuelva a cometer los mismos errores.
Ya solo queda esperar a conocer las causas verdaderas por la cual este dispositivo que para muchos era el smartphone perfecto y que dejó lamentos por doquier, comenzó a explotar de un momento a otro y ver si Samsung recupera a esos usuarios que perdió por dicha falla.
